La Organización Mundial de la Salud y UNICEF subrayan la importancia de la lactancia materna como base para un inicio saludable en la vida. Recomiendan comenzar la lactancia en la primera hora tras el nacimiento y mantenerla de forma exclusiva durante los primeros seis meses de vida. A partir de ese momento, se aconseja introducir alimentos complementarios que sean seguros y nutricionalmente adecuados, mientras se continúa con la lactancia hasta los dos años o más. Sin embargo, muchos niños no reciben esta alimentación ideal. Según la Organización Mundial de la Salud, solo alrededor del 36% de los lactantes de 0 a 6 meses recibieron lactancia exclusivamente materna entre 2007 y 2014, lo que destaca la necesidad de promover estas prácticas beneficiosas a nivel global.
Para quienes no amamantan a los niños después del año de vida, existen las leches o fórmulas infantiles “de crecimiento”. Estas fórmulas modificadas están diseñadas para servir de transición entre la leche materna o de continuación y la leche de vaca. Existen algunas presentaciones sin lactosa, para los niños con intolerancia o alergia.
La Asociación Española de pediatría, Fundación Española de la Nutrición y la Fundación Iberoamericana de Nutrición (FINUT), presentan las siguientes consideraciones técnicas sobre las leches de crecimiento para los niños pequeños:
Son una opción útil para alcanzar la ingesta de nutrientes esenciales recomendados en la infancia. La leche de vaca no debe introducirse en la alimentación del niño antes de los 12 meses. Las leches de crecimiento pueden ser una ayuda útil a partir del año de edad, complementaria a la dieta infantil, para alcanzar las ingestas recomendadas de omega-3 DHA, hierro o vitamina D.
La Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) sugiere que el desarrollo de leches enriquecidas con nutrientes esenciales puede ser de utilidad para cubrir los requerimientos de determinados nutrientes, cuando la ingesta es deficitaria, como el yodo, el hierro, la vitamina D o el Omega 3 DHA.
Las leches de crecimiento mejoran el perfil lipídico y proteico de la leche. La leche proporciona proteínas de alto valor biológico, fundamentales para el crecimiento y desarrollo infantil. Con el objetivo de adaptarse mejor a las necesidades de los niños de corta edad, las leches de crecimiento tienen un contenido proteico reducido, ya que la cantidad de proteínas presente de manera natural en la leche de vaca es elevada para los niños pequeños. También tiene un perfil lipídico modificado, mas equilibrado, al incorporar mayor cantidad de ácidos grasos poliinsaturados -como el Omega 3 DHA- y reducir el contenido de grasa saturada.
El azúcar en las leches de crecimiento. Al igual que ocurre en la leche materna, el principal azúcar de las leches de crecimiento es la lactosa, naturalmente presente en todas las leches y productos lácteos. Además, algunas de estas leches pueden contener una pequeña cantidad de azúcar añadido, con el objetivo de matizar el sabor que aportan otros nutrientes como el Omega-3 DHA o el hierro.
A continuación se presenta una comparación del contenido nutricional de la leche de vaca, leche de vaca enriquecida y las leches de crecimiento (por 100 ml):
Como puede visualizarse en la tabla, cada leche puede contener nutrientes en mayor o menor cantidad, que buscan satisfacer las necesidades nutricionales de la población. Los dos tipos de leche de crecimiento, incluso se encuentran adaptadas a los requerimientos de niños a partir de los 12 meses y a partir de los 3 años.
Una reciente publicación destaca la necesidad de que los niños en proceso de crecimiento consuman leches especialmente adaptadas para lactantes para brindar una alimentación más precisa. Señalan que: “los lactantes de mayor tamaño requieren una ingesta diaria de leche artificial significativamente mayor que los lactantes más pequeños” (Shafaeizadeh, y colaboradores, 2024).
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Una reciente publicación de Shafaeizadeh, y colaboradores, 2024 publicada en el European Journal of Pediatrics, señala que las guías actuales sobre los requerimientos diarios de leche de fórmula para lactantes se basan en el crecimiento de bebés que siguen el percentil 50 de peso para la edad, lo que puede no reflejar las necesidades de bebés con pesos en otros percentiles. Este estudio buscó generar recomendaciones ajustadas de ingesta diaria de fórmula para lactantes alimentados exclusivamente con fórmula, considerando diferentes categorías de peso para la edad entre 0 y 4 meses. Calcularon rangos de peso teóricos según los percentiles de longitud para la edad (de acuerdo a la Organización Mundial de la Salud) y se convirtieron los requerimientos energéticos diarios en necesidades de leche de fórmula. Luego, estas recomendaciones se compararon con datos reales de ingesta de leche de fórmula de 13 ensayos clínicos. Los resultados mostraron que los bebés más grandes consumen volúmenes diarios de fórmula significativamente mayores, aunque los bebés más pequeños ingieren más fórmula en relación a su peso corporal (ml/kg/día). Concluyen que tanto los cálculos teóricos como los datos reales indican que los bebés más grandes necesitan más fórmula diariamente, y que las recomendaciones actuales podrían ajustarse mejor a las necesidades individuales para optimizar el crecimiento y desarrollo en los primeros meses de vida.
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Original de Dr. D. José Manuel Moreno Villares, Pediatra, Unidad de Nutrición Clínica del Hospital Universitario 12 de Octubre; Dr. D. Federico Lara Villoslada, Departamento de Nutrición y Seguridad Alimentaria, Puleva Food S.L.; Dr. D. José Maldonado Lozano, Profesor Titular de Pediatría, Servicio de Pediatría del Hospital Universitario Virgen de las Nieves
Actualizado y revisado por Dra. Jennifer Bernal-Rivas. Nutricionista-Dietista, Máster en Nutrición Humana y Doctora en Ciencias. Fundación Iberoamericana de Nutrición-FINUT. marzo, 2025.
Referencias
Asociación Española de pediatría, Fundación Española de la Nutrición, FINUT. Leches de crecimiento en el niño pequeño. https://www.aeped.es/sites/default/files/documentos/decalogo-lechesdecrecimiento.pdf Consultado 6 de marzo 2025.
UNICEF. Alimentación entre los 6 meses y los 3 años. Consejos para un crecimiento saludable. https://www.unicef.org/uruguay/crianza/primeros-anos/alimentacion-entre-los-6-meses-y-los-3-anos Consultado 7 marzo 2025
National Institute of Health (NIH). Omega-3 Fatty acids. (2024) https://ods.od.nih.gov/factsheets/Omega3FattyAcids-HealthProfessional/ Consultado 11 febrero 2025.
WHO. Alimentación del lactante y del niño pequeño (2023) https://www.who.int/es/news-room/fact-sheets/detail/infant-and-young-child-feeding Consultado 7 marzo 2025.
Shafaeizadeh, S., Henry, C. J., van Helvoort, A., Alles, M., & Abrahamse-Berkeveld, M. (2024). Tailored recommendations for infant milk formula intake results in more accurate feeding. European Journal of Pediatrics, 183(11), 4693-4704.
