Lograr que los niños consuman suficiente fruta es un desafío para muchas familias. Sin embargo, es crucial, ya que las frutas aportan vitaminas, minerales, fibra y antioxidantes que benefician su crecimiento y previenen enfermedades a largo plazo. Aquí te damos algunos consejos respaldados por investigaciones recientes para que puedas fomentar este hábito en casa.

Hazlo divertido y creativo

Los niños tienden a aceptar mejor la comida cuando esta es atractiva y divertida. Puedes usar moldes para cortar frutas en formas interesantes, como estrellas o corazones, o preparar platos con diseños que cuenten historias, como un paisaje de frutas o una cara sonriente. Según estudios, involucrar a los niños en la preparación de los alimentos no solo mejora su aceptación, sino que fortalece sus elecciones saludables en el futuro.

Macedonias y mezclas deliciosas

Ofrecer fruta en forma de macedonia es una forma práctica y colorida de despertar el interés infantil. Mezcla frutas frescas de temporada con yogur o un toque de miel, lo que las hace más sabrosas y aumenta el consumo de nutrientes como el calcio y los probióticos, esenciales para la salud digestiva.

Jugos y batidos caseros

Aunque los jugos no conservan toda la fibra de la fruta, son una alternativa saludable a los refrescos azucarados. Los batidos, en cambio, mantienen más fibra y pueden enriquecerse con leche o alternativas vegetales para un aporte extra de calcio y proteínas. Evita añadir azúcar adicional, ya que las frutas contienen azúcares naturales suficientes.

Combina frutas con alimentos familiares

La integración de frutas en recetas cotidianas puede aumentar la aceptación de los niños. Por ejemplo, acompaña carnes con puré de manzana o salsas de naranja, y añade trocitos de fruta a ensaladas, crepas o cereales. Estas combinaciones no solo mejoran el sabor, sino que también añaden textura y nutrientes esenciales a las comidas.

Brochetas y fondues

Las brochetas de frutas son fáciles de preparar y resultan muy atractivas para los niños. Puedes usar trozos de frutas de distintos colores y tamaños en palillos de brocheta. Para ocasiones especiales, una fondue de chocolate negro puede ser un acompañamiento interesante y saludable.

La importancia de modelar hábitos saludables

Los niños imitan lo que ven. Comer frutas frente a ellos y mostrarse entusiasta al respecto es una de las estrategias más efectivas para fomentar este hábito. Además, la exposición repetida a frutas nuevas, aunque al principio no sean aceptadas, puede llevar a su inclusión en la dieta.

Repostería casera con frutas

Prepara galletas, bizcochos o tartas utilizando puré de frutas como edulcorante natural. Esto no solo es más saludable, sino que también mantiene el sabor atractivo para los niños. Los productos horneados con frutas pueden ser una manera efectiva de introducir nutrientes esenciales en la dieta de los pequeños.

Fruta como opción práctica para llevar

Cuando salgan de casa, incluye piezas de fruta fáciles de transportar como manzanas, mandarinas o plátanos. Si prefieres, corta frutas y guárdalas en recipientes herméticos. Esta estrategia asegura que tengan opciones saludables disponibles siempre.

Fomentar el consumo de frutas en la merienda es igual de importante. Aquí hay algunas ideas para hacer que la hora de la merienda sea saludable y divertida:

Frutas con dip saludable Ofrece frutas como manzanas o plátanos con dip de yogur griego o mantequilla de almendra. Esto no solo añade sabor, sino que también proporciona proteínas y grasas saludables que ayudan a mantener la saciedad.

Barritas de frutas caseras Prepara barritas de frutas caseras mezclando avena, nueces, semillas y frutas secas. Estas barritas son una opción nutritiva y fácil de llevar, perfectas para el colegio.

Frutas congeladas Ofrece frutas congeladas como un snack refrescante. Las uvas, los trozos de mango o las fresas congeladas son opciones deliciosas y divertidas que pueden ser un gran hit entre los niños, especialmente en días calurosos.

Sorbete de frutas Prepara sorbetes caseros utilizando frutas congeladas. Simplemente mezcla las frutas en una licuadora hasta obtener una consistencia suave. Esto puede ser un delicioso postre o merienda sin azúcares añadidos.

Meriendas en forma de juego Organiza meriendas temáticas donde las frutas sean la estrella. Por ejemplo, un “día de la selva” con frutas tropicales o un “picnic de frutas” donde cada uno elige su fruta favorita. Hacer de la merienda un juego puede aumentar el interés de los niños en probar diferentes frutas.

Tarros de frutas Prepara tarros de frutas en capas con yogur y granola. Esto no solo es visualmente atractivo, sino que también proporciona un equilibrio de nutrientes. Los tarros son fáciles de transportar y pueden ser una opción divertida para la merienda en el colegio.

Frutas en salsas o ensaladas Crea salsas de frutas para acompañar galletas integrales o palitos de verduras. Por ejemplo, un salsa de mango o una ensalada de frutas con un toque de limón puede ser una forma deliciosa de incorporar más fruta.

Frutas como premio Asocia el consumo de frutas con recompensas. Por ejemplo, si terminan sus tareas o ayudan en casa, pueden disfrutar de una fruta especial o un batido. Esto puede motivar a los niños a elegir frutas de manera más habitual.

¿Sabías que?

¡El color de las frutas no es solo un capricho de la naturaleza! Los pigmentos que dan color a las frutas (como los carotenoides en las naranjas y los flavonoides en las uvas) tienen propiedades antioxidantes que protegen las células del cuerpo. Estos compuestos también ayudan a prevenir enfermedades crónicas como la diabetes tipo 2 y ciertos tipos de cáncer. Con estas estrategias prácticas y respaldadas por la ciencia, ayudarás a tus hijos a disfrutar de los beneficios de una alimentación saludable, rica en frutas y equilibrada.

Dª. María del Carmen Moreu Burgos, Farmacéutica y Tecnóloga de los Alimentos, Diplomada en Nutrición

Revisado por María Gabriela Sagastume Rodríguez, Estudiante de Nutrición Clínica, Universidad Mariano Gálvez de Guatemala. Fundación Iberoamericana de Nutrición. Diciembre, 2024.

Referencias

Popkin BM, Duffey KJ. Does hunger and satiety drive eating anymore? Increasing eating occasions and decreasing time between eating occasions in the United States. Am J Clin Nutr. 2010;91(5):1342-7.

Zuraini Z, Chew LY, Alagarsamy S, et al. Promising Nutritional Fruits Against Cardiovascular Diseases: An Overview of Experimental Evidence and Understanding Their Mechanisms of Action. Vasc Health Risk Manag. 2021;17:775-791.

Lockyer S, Spiro A, Stanner S. Dietary fibre and the prevention of chronic disease – should health professionals be doing more to raise awareness? Nutr Bull. 2016;41(3):214-31.